16 junio 2012

Camina o revienta


Objetivamente, aquí hay dos tipos que dan pena. El uno porque sí, y el otro porque también. Este montaje que llegó a cierta red social gracias al encomiable esfuerzo de un amigo que se dice amigo pero enemigo debe de ser, refleja el patetismo de un ser mentalmente destrozado.

Dicen algunos que hay que aguantar buena carga de presión y tener un buen sentido del humor para llegar a casa después de horas de hospital, magullado y dolorido, y pedirle a tu mujer que te haga una foto de tal guisa. Pero no lo creo. En realidad, lo que hay que hacer es recordar lo que pasó y tenerlo presente, saber que se está donde se está por cuestiones del destino, y que si andamos y usamos los brazos y las manos y además masticamos, es todo en sí un regalo.

Hoy ni el Lute se acordará de aquellos tiempos ni yo lo hago. Aquel hombre, después de delinquir, volvía a hacerlo, y en mi caso, después de sufrir un accidente en bici, me volví a montar en ella como si tal cosa. En ningún caso -me di cuenta con el paso de los kilómetros-, pensé en tener miedo, ni recordé aquel coche cruzado y el triple salto mortal del 29 de abril. Iba ya contra el viento, dándome el sol en la espalda y llenándome de energía que mis piernas trasladaban a los pedales, raudo por unas carreteras que, lo creo en serio, me echaban de menos como yo a ellas. Porque las amo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Rafa !
como fiel seguidor de tu blog, ya sabía yo que algo pasaba. Tanto tiempo sin derramar ni una gota de "tinta" y ILUSIÓN EN TUS COMENTARIOS.
RECUPERATE MUY PRONTO PARA PODER CONTINUAR EN LO QUE REALMENTE AMAMOS.
SALUD !!!!!!!!!!

PAU PIERA

Ricardo Cabrera Cosano dijo...

Joder, Rafa, la verdad es que extrañaba tu ausencia... Pues nada, a mirar con optimismo, al menos, puedes contarlo y seguir en la brecha pedaleando!

Un fuerte abrazo y todos los ánimos del mundo, amigo!