25 febrero 2009

Me encanta

Hoy estoy en Valencia. He cogido la bici y he ido por el carril de la Via Augusta, he pasado por campos de cebollas, luego de naranjos. He cruzado pueblos de l'Horta: Meliana, Albalat, Albuixec, Massalfassar, La Pobla de Farnals, Puçol. Luego he salido de la Vía Augusta justo antes de llegar a su destino, el castillo romano de Sagunto, para ir hacia el interior. Entonces los naranjos han desaparecido, y han empezado a asomar la cabeza los pinos mediterráneos llenos de nidos de orugas, señal inequívoca de que llega la primavera. Gilet, Estivella, Segart, Albalat dels Tarongers. La tierra ha pasado de estar arada y oler intensamente, a un fuerte color rojizo de la piedra de la sierra de la Calderona. He visto entonces olivos, ya recogido su fruto, y luego almendros en flor. Fantástica visión esta del adiós al frío invierno. Entonces he almorzado en Torres Torres, sentado en una acera viendo al personal y sus casas bajas, su vida, para luego reiniciar la marcha y subir el Oronet por su cara Norte. Primero naranjos en fila y luego pinos de nuevo han armonizado el viaje, un conejo despistado ha asomado su hocico antes de desaparecer de mi vista, y entonces he llegado a la cima. La bajada ha sido rápida, y de nuevo he visto pinos, almendros, olivos, naranjos y, para acabar, los campos de cebolla que me han recibido a los pies de la ciudad.

Mañana repito, porque simplemente me encanta.

2 comentarios:

miviajesideral dijo...

Me gusta como sientes las cosas!
Por aquí en Salamanca ciudad coger una bici no es tan sencillo, primero tienes que sortear la fauna del asfalto, y al terminar solo hay llanuras de campos de cereales...

Siempre nos quedará la sierra a pocos kilómetros!

Saludos

Rafa dijo...

Te desconozco, pero agradezco tu comentario.
Rafa