
Patxi, a pocos metros de coronar el Portitxol.
Los cuatro acabaron muy cansados, pero con el paso de los días, sin ni siquiera habérselo preguntado, sé que están muy satisfechos. Atrás quedan los dolores de piernas.
Samu, en la cima del puerto, y sonriendo.
Les esperan nuevos retos y nuevas batallas contra sí mismos, que es al fin y al cabo en lo que consiste esto de los duatlones y los triatlones.
Javi Bellvis, demostrando que cada vez va a más.
Yo les animo a continuar luchando y sobre todo a seguir disfrutando. El sufrimiento siempre tiene premio, y la satisfacción de acabar cada carrera no tiene precio.

Javi Borso, este hombre es todo valentía.
Nota: Las imágenes de esta entrada son propiedad de José Miguel Manzaneque, están extraídas de un álbum Picasa y he intentado pedir permiso para su publicación, sin que lo haya conseguido pues no había ningún dato para poder contactar. En todo caso, si fuera necesario, estoy en condición de borrarlas y destruírlas si el autor de las mismas así lo considera oportuno. Mi dirección es dameunrelevo@yahoo.es.
1 comentario:
Espero disfrutar muchoa más!! A ver si coincidimos en alguno contigo.
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